Programa Educar para Recordar


Programa Educar para Recordar

El programa Educar para Recordar tiene como objetivos: fortalecer a través de una educación integral la enseñanza de principios y valores éticos, morales y espirituales; la reflexión y la práctica de acciones de respeto a los derechos universales y la dignidad humana, tomando como base el estudio de la historia del Holocausto y otros genocidios, ya que estos acontecimientos dejaron enseñanzas universales que deben ser transmitidas a las presentes y futuras generaciones, para formar seres humanos que trabajen activamente por la paz de la familia humana.

Las lecciones del pasado dejan enseñanzas vivas para la humanidad; hechos que aunque hayan acontecido en otro continente, permiten a los estudiantes aprender acerca de las consecuencias de la intolerancia, el odio, la discriminación, los prejuicios, los estereotipos, el irrespeto por la vida y la dignidad humana. El reconocimiento de estos hechos permite identificar las señales de alarma ante el surgimiento de Gobiernos, grupos o personas extremistas que realicen estas acciones, las cuales pueden desencadenar un nuevo delito contra la familia humana.

Es una obligación recordar el pasado, concienciando a las presentes generaciones sobre los factores que desencadenaron los diferentes genocidios y las circunstancias que los propiciaron, así como las consecuencias y repercusiones que dejaron en la humanidad. El genocidio es un crimen internacional que debe ser reconocido por todos los Estados, Gobiernos y países, a fin de asegurar el futuro de nuestros pueblos, sobre la base de la justicia, la verdad, la armonía y la equidad.

Educar para Recordar trabaja en cuatro campos de acción:

  • Huellas para no olvidar”
  • Proyecto de Ley “El Holocausto, paradigma del genocidio”
  • Programa Educativo “Educar para Recordar”
  • Cátedra de Derechos Humanos y Holocausto
Introducción

>p>El proyecto “Huellas para no olvidar” tiene como propósito mantener vivo el testimonio de los sobrevivientes del Holocausto, como una forma de prevenir la reiteración de uno de los capítulos más siniestros de la historia humana. Exalta el respeto por la vida, la libertad y la dignidad humana, así como adopta la verdad histórica en torno al Holocausto perpetrado contra el pueblo judío y otras víctimas de grupos minoritarios en la Segunda Guerra Mundial, por ser este uno de los genocidios más evidenciados y reconocidos como hecho histórico por la comunidad internacional y por Alemania.

 

El mundo debe recordar que después del Holocausto de la Segunda Guerra Mundial han ocurrido más genocidios en todos los continentes del planeta. Basta recordar Camboya (1975-1979), Ruanda (1994), Bosnia (1995) y Darfur (desde 2003 a la fecha), por solo citar algunos de los casos más representativos; y la única forma de prevenirlos es a través de la educación.

Este proyecto consiste en la exhibición de una placa con la forma de la Estrella de David, que contiene las huellas palmares de un sobreviviente del Holocausto, así como las huellas de uno de sus hijos y las de uno de sus nietos. La placa va acompañada de una lámina que presenta un texto con una breve descripción de lo que sucedió en el Holocausto, y un relato de la historia del sobreviviente.

a) Exposición de las placas “Huellas para no olvidar” y Foros Universitarios “El Holocausto, Paradigma del Genocidio” y “Holocausto y Derechos Humanos”

Las placas se presentan y se exponen acompañadas de una galería fotográfica sobre el Holocausto y otros genocidios, en foros educativos, con la temática “El Holocausto, Paradigma del Genocidio” y “Holocausto y Derechos Humanos”, los cuales se realizan en universidades y talleres para estudiantes en escuelas de nivel primario y secundario, donde los sobrevivientes honrados con las placas dan a conocer sus vivencias y experiencias, e interactúan con el público.

Especialistas en Derechos Humanos e historiadores capacitan a los participantes sobre los hechos cronológicos del Holocausto y otros genocidios, y abordan temáticas sobre los conflictos actuales en el mundo.

La exposición de las placas y las galerías fotográficas también se presentan en embajadas, sedes de entidades oficiales, de Gobierno (parlamentos, ministerios, cancillerías), instituciones culturales (museos, parques, plazoletas) y religiosas.

La reiteración de estos hechos muestra que la humanidad no ha aprendido la lección acerca de la violencia que genera el odio, la intolerancia y la discriminación, y, por tanto, no se puede pasar esa página de la historia, sino que hay que recordarla, enseñarla y aprender de ella.

“Huellas para no olvidar”

Esta iniciativa está fundamentada en la Resolución 60/7 del 1º de noviembre de 2005, aprobada por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, la cual “insta a los Estados Miembros a que elaboren programas educativos que inculquen a las generaciones futuras las enseñanzas del Holocausto con el fin de ayudar a prevenir actos de genocidio en el futuro”, y en otros instrumentos internacionales.

Objetivo general

Incluir “El Holocausto, Paradigma del Genocidio” como tema de estudio, reflexión y debate en los programas de educación que se imparten en los centros educativos de carácter oficial y privado, en sus diferentes niveles, enfocando este hecho histórico como una herramienta que permite profundizar en las estrategias para prevenir el genocidio, y reflexionar sobre la importancia de una educación centrada en principios y valores éticos, morales y espirituales; ayudando a la sociedad en la ejecución de acciones para promover, defender y preservar los Derechos Humanos, contrarrestar la violencia y la intolerancia, y despertar el amor y respeto por el prójimo, sin importar su condición social, su cultura, religión o nacionalidad.

Objetivos específicos

  1. La elaboración de una iniciativa de Ley que establezca la enseñanza del Holocausto, otros genocidios y conflictos actuales, en todos los niveles educativos, desde preescolar hasta universitario.
  2. La presentación de la iniciativa de Ley “El Holocausto, paradigma del genocidio” en las legislaturas de los países, con el seguimiento que corresponde durante todo el proceso legislativo hasta su aprobación, publicación y entrada en vigencia.
  3. La implementación de la Ley “El Holocausto, paradigma del genocidio” por parte de los Estados y gobiernos de cada país, a través de sus Ministerios o Secretarías de Educación, mediante la instauración de los programas educativos sobre el Holocausto, otros genocidios y conflictos actuales, en los planes de estudio de las escuelas.
Proyecto de Ley “El Holocausto, Paradigma del Genocidio”

Este Programa Educativo propone enseñar la historia del Holocausto y otros genocidios, sobre la base de la enseñanza en Derechos Humanos y valores éticos, morales y espirituales, dirigido a estudiantes y docentes de escuelas públicas y privadas, y de universidades.

a) Programa Educativo a nivel escolar:

Su finalidad es contribuir en el proceso de enseñanza y aprendizaje, conteniendo temáticas sobre el respeto, tolerancia, justicia, equidad, igualdad, solidaridad, el estudio y promoción de los Derechos Humanos, y el análisis de genocidios perpetrados en la historia, con énfasis en el Holocausto.

Siguiendo el enfoque humanista, constructivista y los principios educativos del Dr. William Soto, se pretende contribuir a la formación y el desarrollo de un ser íntegro y crítico, que base sus decisiones e ideales éticos en necesidades e intereses humanos, logrando asimilaciones importantes, construyendo su propio aprendizaje y mostrando acciones positivas basadas en el respeto y amor por la dignidad humana.

Objetivo general

Promover los principios, valores y derechos humanos a través del estudio del Holocausto, fortaleciendo una cultura de paz y respeto hacia la dignidad de la familia humana para el desarrollo de una educación integral en las escuelas de los diferentes países de América Latina y del mundo.

 

b) Talleres de capacitación a docentes “Educar para Recordar – El Holocausto, paradigma del genocidio”:

Estos talleres están dirigidos a docentes del nivel escolar, y se propone ofrecer las bases para el manejo e implementación integral de este Programa Educativo a partir de su fundamentación filosófica y estrategias pedagógicas concretas.

El genocidio, los crímenes contra la dignidad humana, y en forma específica el Holocausto, son temáticas poco abordadas en los currículos, programas y/o planes educativos; por esa razón es preciso incrementar los conocimientos de formación académica sobre la historia del Holocausto, sobre los hechos que durante ese contexto histórico desencadenaron en medio de la sociedad la falta de valores éticos, sociales, morales y espirituales, y la transgresión de los Derechos Humanos.

El ámbito de la capacitación a docentes implica un sentido de formación integral en personas que ejercen esta profesión de roles amplios en la educación; es un proceso de instrucción-aprendizaje que se lleva a cabo para perfeccionar o actualizar a todos aquellos involucrados en la implementación de programas, proyectos o planes educativos.

Objetivo general

Lograr que los docentes de nivel básico/primario y nivel medio/secundario de la educación formal escolar tomen conciencia sobre la importancia de enseñar el Holocausto como paradigma del genocidio, y refuercen sus conocimientos y preparación para impartir e inculcar en los estudiantes escolares las temáticas de principios, valores y derechos humanos, presentadas en el Programa Educativo “Educar para Recordar”. 

Programa Educativo “Educar para Recordar”

A mediados de los años '30, millones de judíos comenzaron a ser humillados, maltratados y segregados. Paulatinamente les quitaron sus derechos, primero como ciudadanos y finalmente como humanos, hasta que fueron recluidos en campos de concentración y de exterminio para ser eliminados, sin distingo de edad o género, en forma paulatina, sistemática y masiva, por medio de hambre, enfermedades, frío, trabajos forzados, golpes, disparos, ahorcamiento, cámaras de gas y, en ocasiones, de maneras tan atroces que aún hoy resultan inconcebibles y repulsivas.

Fue “la solución final al problema judío” implementado por la Alemania nazi contra los supuestos culpables de los males del país. No fueron las únicas víctimas, pero otros grupos perseguidos como los gitanos, los homosexuales, Testigos de Jehová y los comunistas, no sufrieron una exterminación tan enconada y obsesiva.

Hubo sobrevivientes, algunos con más suerte que otros, que hubieron de recomenzar su vida en tierras extrañas, sólo con el recuerdo de sus seres queridos desaparecidos. Su fuerza de voluntad para sobreponerse a la adversidad y su determinación para seguir adelante, aun a veces en contra de sí mismos, inspiraron al naciente Estado de Israel.

Hoy su testimonio se comparte a través del proyecto “Huellas para no olvidar” del Dr. William Soto Santiago, fundador de la Embajada de Activistas por la Paz, con un mensaje dirigido de manera especial a las nuevas generaciones, para que el epítome de los genocidios sirva de ejemplo a quienes deben ahora tomar la bandera de los Derechos Humanos y de la paz, y enarbolarla en lo alto de la conciencia humana, para que nunca se repita.

Sobrevivientes

Sobrevivientes