En San Juan de Pasto, Colombia: Propuesta de Ley que promueve incluir el Holocausto como tema de estudio en el sistema educativo encuentra respaldo.Embajada Mundial de Activistas por la Paz

En San Juan de Pasto, Colombia: Propuesta de Ley que promueve incluir el Holocausto como tema de estudio en el sistema educativo encuentra respaldo.

Colombia

Colombia

28 de marzo, 2014

El Museo de Artes y Tradiciones Populares de Nariño "Taminango", fue el escenario para la realización del segundo Foro en Colombia realizado el pasado 28 de marzo en la capital del Departamento de Nariño, logrando sensibilizar a los asistentes debido al conflicto vivido en Colombia por tantos años. 

El común denominador de esta temática “Educando para No Olvidar – El Holocausto, paradigma del genocidio”, constantemente confluyó en la necesidad de encontrar eco con los hechos vividos durante el conflicto armado que aún no ha tenido fin en Colombia. Tanto los ponentes como la audiencia hallaron paralelismos y similitudes, y expresaron constantemente la necesidad de la realización de estos Foros, así como el respaldo al proyecto de ley para educar en torno a las lecciones dejadas por el Holocausto:

«Considero que será siempre oportuno recordar el Holocausto y los genocidios, para hacer conciencia sobre la libertad, la paz, la democracia, la alteridad, la diferencia, el pluralismo. […] Estos eventos son escenarios que sirven para enfatizar en la necesidad de construir la paz en nuestro país. […] Con respecto a este episodio irracional, como fue el genocidio de la población judía, nos solidarizamos con la propuesta de estructurar un proyecto de ley para involucrar en los currículos de las instituciones educativas la asignatura relacionada con el Holocausto y los genocidios, que en el mundo ocurren por el ejercicio de lo que denominamos colonialidad del poder, del saber y del ser, por parte de los países imperiales, y de ciertos hombres y mujeres que se consideran superiores en el mundo». (Dr. León, Historiador).

«A nuestro entender, este evento cobra muchísima mayor importancia por la coyuntura por la que está atravesando el país. Este evento, de suyo es importante, pero es mucho más si lo entendemos que se desarrolla en el marco de un país que, como el nuestro, aspira a ponerle fin a cincuenta años de guerra, de esclavitud, de tragedia nacional. […] Claro, compartimos con ustedes: educar para no repetir la historia, para avanzar inspirados en la fuerza de la Educación y de los nuevos valores, y no inspirados en la fuerza de la fuerza». (Dr. Fajardo, Oficina de Derechos Humanos)

«Que este Foro de “Educando para No Olvidar” sea la oportunidad y tal vez sea la excusa para que: nos vamos interesando en nuestra realidad, en nuestro contexto, en nuestra… en nuestra propia violencia. Que esto sea una invitación más para entender por qué hoy estamos sufriendo lo que estamos sufriendo». (Dr. Torres de la Universidad Mariana).

La senadora, Dra. Miriam Paredes, manifestó públicamente su interés en apoyar esta iniciativa del Dr. William Soto, Embajador Mundial de Activistas por la Paz: «Este tema tiene que concluir con un proyecto de ley que se discuta en el Congreso Nacional. […] Estudiar estos fenómenos humanos y sociales trascendentales en nuestro desarrollo histórico, es aún más importante para quienes hemos vivido en un país en conflicto».

Con la asistencia de casi 300 personas, entre líderes comunitarios, educadores, catedráticos, universitarios, estudiantes, profesionales, periodistas, representantes de la sociedad civil y entidades públicas, se vivió un encuentro que sensibilizó y motivó a formar el futuro sin olvidar el pasado.

La galería fotográfica que acompañó el evento, así como la Placa conmemorativa "Huellas para no olvidar" de Sigmund Halstuch, sobreviviente del Holocausto, quien también estuvo presente con su hijo Carlos, podrán apreciarse durante todo el mes de abril en diferentes espacios universitarios de la ciudad de San Juan de Pasto.

 

Semblanza de las exposiciones

El Dr. Gerardo León, Historiador de la Academia de Historia de Nariño, hizo un recorrido de los hechos desde que Hitler sube al poder en 1933, hasta los detalles actualmente visibles en el hoy convertido Museo de Auschwitz, “para que el mundo no olvide la brutalidad cometida contra el pueblo judío, y en verdad, contra la humanidad entera.”

En su intervención, resaltó la plataforma ideológica del nazismo dentro de un Estado totalitario y dictador, fundamentado “en un profundo y desmedido racismo” el cual proclamaba a los alemanes como raza superior, de inteligencia máxima, y “por tanto su destino era dominar a las razas inferiores”; para lo cual introdujo en los centros educativos “la enseñanza de los principios básicos del nazismo y del racismo,” con una asignatura llamada Ciencia de la Raza, “con carácter de obligatoria”.

El historiador también manifestó que la política discriminatoria no fue exclusiva de Alemania, puesto que el concepto de “raza” ha sido reproducido a lo largo de los siglos para los colonizadores excluir y marginar.

El Dr. Mario Miguel Fajardo, Director de la Oficina de Paz y Derechos Humanos de la Gobernación de Nariño resaltó que en tiempos de globalización, también se debería globalizar la justicia, la equidad, “la democracia y no la guerra, la confrontación y la polarización.”

En su intervención reflexionó en torno a los conceptos de paz, desarrollo y educación, los cuales fueron “trastocados” en la época del nazismo, y en su lugar se edificó una ideología “en contra de las democracias liberales, y predicando la tesis de la necesidad de gobiernos generalmente fuertes, dictatoriales”.

Posteriormente agregó «El Holocausto no inicia ni mucho menos termina en los campos de concentración ni en los hornos crematorios. A nuestro juicio, nace cuando un grupo de individuos se van identificando y se organizan alrededor de estas ideas, de estos imaginarios perversos».

Finalmente expone su propuesta para “rehabilitar, inventar, reinventar, conceptos sobre el amor y el poder”, y finaliza con unas palabras del poeta peruano Montalvo: “Desgraciado el pueblo donde los jóvenes son humildes con el tirano. Desgraciado el pueblo donde los jóvenes son humildes con la injusticia, con la inequidad y con la violencia. Desgraciado el pueblo donde los jóvenes no se levantan, no se ponen de pie, y no hacen temblar el mundo”.

El Foro también contó con la presencia del señor Sigmund Halstuch, sobreviviente del Holocausto, quien narró ante los presentes la tragedia de perder a toda su familia y amigos; en una población de aproximadamente 15.000 judíos, donde solo 180 lograron quedar vivos. Después de diferentes vivencias en el gueto y hasta una cirugía de apendicitis que lo salvó de que se lo llevaran, su mamá quiso tomar veneno para morir, pero él no la dejó; fue entonces cuando un campesino católico ayudó a esconderlos durante diez meses en un hueco de 80 centímetros, tras una pared falsa, hasta que llegaron las tropas rusas y los liberaron.

El Director de Comunicación Social de la Universidad Mariana, Dr. Francisco Javier Torres, invitó a los jóvenes a que reflexionen en torno a lo que sucedió, a no tener “algún tipo de mirada ni siquiera cómplice o conciliadora con esto”, y a ver la necesidad de que estos hechos “que nos inquietan, nos conmueven, también los pensemos a nivel interno, los pensemos también a nivel de nuestra propia realidad” y finalizó con la exhortación: «Que este evento, que esta reunión, que este encuentro, no puede terminarse hoy a las 6:00 de la tarde, porque estamos “educando para no olvidar”, y educando para la sensibilidad, y educando para que ganemos un poco de sensibilidad, un poco de entendimiento, un poco de comprensión. Y cuando salgamos de aquí y a partir de hoy, tengamos la posibilidad de recordar que nosotros somos los arquitectos de nuestro destino… No podemos ni debemos seguir promoviendo cualquier tipo de violencia, cualquier forma. Ojo, la violencia no sólo es la que nos presentan en la guerra sino la que a diario cometemos como actos de violencia».

La Dra. Miriam Alicia Paredes Aguirre, Senadora de la República de Colombia expresó su voluntad para impulsar en el Congreso el proyecto de ley propuesto por la Embajada de Activistas por la Paz y afirmó: «El estudio del Holocausto, sus causas y consecuencias, lejos de constituirse en un mero referente histórico para jóvenes estudiantes, es un tema de reflexión para la sociedad, y en especial para quienes ostentamos cargos de representación con liderazgo y vocación de poder; pues este hecho, uno de los más oscuros en la historia de la Humanidad, es en realidad el triste ejemplo de la crueldad, la degradación, la discriminación y los antivalores que el ser humano puede despertar y reflejar en sus actos. Por supuesto, es el paradigma de lo que no debe volver a repetirse en la historia humana».

La senadora también resaltó el papel de “quienes tenemos la necesidad de diseñar leyes, políticas públicas, programas,” así como “utilizar las herramientas que las normas, la experiencia y la historia nos da”, para brindar una legislación acorde con la problemática; por lo cual se van logrando avances en Colombia como la Ley 1482 del 2011 o Ley Antidiscriminación, la Ley 1448 del 2011 conocida como ley de víctimas y restitución de tierras, y el Centro de Memoria Histórica, “que tiene como objetivo reunir y recuperar todo el material documental, testimonios orales y cualquier información relativa a las violaciones, con el fin de proporcionar el conocimiento de nuestra historia”.

Enfatizó: «Si programas como el que actualmente viene realizando la Embajada de Activistas por la Paz, estuvieran presentes en todos los colegios de Colombia, tal vez hoy otra sería nuestra realidad, pues en especial aquellos niños y niñas que han sido educados en medio del conflicto o víctimas de hechos violentos, tendrían una visión diferente y muchas razones para buscar una sociedad en paz, y no seguir perpetrando el rencor el odio y la violencia; por el contrario, fortaleciendo en ellos los principios de igualdad, de libertad y de respeto por la dignidad humana».

 

Sesión de preguntas y respuestas

En el espacio otorgado para la participación de los invitados diferentes intervenciones surgieron sin querer permitir que el moderador diera por finalizado el evento.

Una estudiante de octavo semestre de Comunicación analizó: “¿Qué tan probable es que actos como los que se ejecutaron en la Alemania nazi se desarrollen en otro tiempo, en otras tierras, con otro nombre, con otros victimarios y otras víctimas?” Y a su vez documentó: “Es indignante saber que en un país donde la violencia azota hace más de cincuenta años, se desconocen actos de barbarie, como por ejemplo uno que se conoció en el 2009, que fue la fosa común más grande de Latinoamérica, que se identificó en Colombia con más de 2000 cadáveres en él”.

Finalmente, sin micrófono, se hizo la última pregunta entre el público: “Al sobreviviente del Holocausto le pregunto: ¿Cómo hizo para perdonar a los alemanes después de todo lo que vivió?, porque creo que nosotros debemos empezar a perdonar para así conseguir la paz en esta guerra”.  A la cual el Sr. Halstuch respondió: “Puedo contestarle que lo he pensado muchas veces, pero siempre dice uno mismo: uno no puede odiar a alguien al que no quiso nunca”.