María Paulina Aguirre | Panel 1: Jueces responsables en la impartición de justicia y en la generación de una cultura de paz
María Paulina Aguirre Suárez

María Paulina Aguirre | Panel 1: Jueces responsables en la impartición de justicia y en la generación de una cultura de paz

Video Relacionado:


Nota de transcripción: El texto a continuación fue digitado y revisado en vivo, durante la transmisión de la ponencia y/o traducción. Es posible que esté en proceso de posteriores revisiones para su mejoramiento. De ser requerido, puede ser verificado con la grabación correspondiente. (Sugerencias o comentarios: transcripciones@emapaz.com)

 

Excma. María Paulina Aguirre Suárez

Presidenta de la Corte Nacional de Justicia.

Ecuador

Buenas tardes con todas y todos. Qué grato es estar aquí en la Casa de la Justicia de este hermoso país, que grato.

Es un honor para mí participar en este importante espacio de discusión sobre: justicia universal, desarrollo sostenible y cultura de paz que, convoca distinguidas autoridades con quienes compartiré el día de hoy esta Sesión sobre Justicia y Democracia.

Los pensadores de este evento han planteado interesantes interrogantes, acerca del rol de los jueces en la impartición de justicia y en la generación de una Cultura de Paz. Específicamente en este panel se ha previsto tratar como primer punto, los factores o mecanismos primordiales para garantizar una justicia independiente.

Para responder a esta pregunta, considero oportuno remitirme a la historia del Estado de Derecho.

El profesor Elías Díaz, afirma acertadamente que no todo Estado es Estado de Derecho, pues someter a la administración a la ley, no significa simplemente incorporar a un territorio el concepto de Estado y el concepto de Derecho.

El Estado de Derecho nace históricamente como una forma de racionalización del poder, esto significa controlar los actos de poder de forma jurisdiccional; sin embargo, para que un Estado esté sometido efectivamente al derecho, se deben respetar dos principios fundamentales: la separación de los poderes y la independencia judicial.

Antes de contestar acerca de cuáles son los factores o mecanismos primordiales para garantizar una justicia independiente, primero debemos responder: ¿por qué necesitamos que un Estado sometido al derecho cuente con jueces independientes?.

Podríamos enumerar un sin fin de respuestas, pero he decidido centrarme en las tres más importantes: En primer lugar para limitar el poder; en segundo lugar para proteger el sistema de pesos y contrapesos; en tercer lugar para evitar las injerencias en la toma de decisiones.

Estas respuestas tienen como resultado en común, proteger el Estado de Derecho, donde uno de los poderes del Estado debe cumplir con la función primordial de garantizar la sujeción a la ley; es decir, la materialización del principio de legalidad. La independencia judicial es un derecho humano, que pertenece a los justiciables como lo determinó la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Baena Ricardo y otros versus Panamá; es un derecho humano, el obtener todas las garantías que permitan alcanzar decisiones justas.

Por lo tanto: ¿cómo se alcanza una justicia independiente, como garantía del debido proceso? La independencia judicial solo es posible de conseguir con la creación de mecanismos que resguardan al sistema de administración de justicia, en otras palabras, deben existir garantías que protejan a la difícil laboral que cumplen los jueces, en este marco, concuerdo con las garantías que las CIDH determinado en el caso Reverón Trujillo versus Venezuela; Quintana Coello versus Ecuador en el año 2004, cuando se cesó a la Corte Suprema de Justicia.

En resumen, estas garantías son tres: garantizar adecuados procesos de nombramientos, a través de mecanismos, objetivos irrazonables; garantizar la inamovilidad en el cargo, tema que se relaciona con la permanencia en el cargo, sin que exista un despido injustificado o cargos de libre remoción; garantizar el resguardo en contra de presiones externas de cualquier sector y por cualquier motivo. Y yo considero que es importante añadir, garantizar la no persecución interna de los jueces a través de sanciones administrativas, así como la persecución mediática.

Debe comprenderse entonces, que la independencia judicial es una garantía que busca que el juez pueda decidir conforme a derecho y que las decisiones que adopte, no se vean cuestionadas por los órganos administrativos o por cualquier interés externo; debemos exigir por parte de los demás poderes del Estado, la obligación de respeto a las decisiones tomadas por los órganos judiciales y por sobretodo exigirse, investigue y sanciones a quienes cometen estas interferencias en nuestras labores.

Como segundo punto, me referiré a las principales dificultades a las que se enfrentan los jueces en el mundo globalizado para luego plantear, cuáles son las principales garantías que deben ofrecer los estados, para consolidar la justicia Como fundamento de la paz.

La globalización es un proceso que involucra una variedad de cambios económicos, culturales, sociales y políticos.; entre las características más importantes de este fenómeno, se encuentra el tema de la mundialización de los mercados y las finanzas, que tienen como consecuencia la eliminación de las fronteras. Esto es importante para la justicia, pues además de que existe una interconexión entre los países, hay una interdependencia entre las distintas regiones y habitantes del mundo.

En los sistemas judiciales esto se ve reflejado en la toma de decisiones, pues las resoluciones que se emiten dentro de un estado territorial, tienen ahora un impacto en las vidas de las personas que se encuentran fuera de dicho territorio; sin embargo, esta idea puede analizarse desde otra perspectiva, las decisiones que toman los jueces pueden verse vulneradas, por factores externos que incluso provienen de fuera de las fronteras de su propio país. En definitiva, planteamos nuevamente como una de las problemáticas más importantes en el mundo globalizado de hoy, la independencia judicial.

Los Estados, tienen la obligación de garantizar a toda costa la protección de sus funcionarios judiciales, si es que los gobiernos no cumplen con esta obligación de garantizar la seguridad de sus operadores de justicia, contra toda clase de presiones internas y externas, incluyendo la represalias dirigidas a su persona y familia, el ejercicio de la función jurisdiccional puede ser gravemente afectada. No es posible exigir a la justicia ser fundamento de la paz, si es que está se ve afectada constantemente por los ataques contra los operadores de justicia.

Los jueces somos seres humanos, cuyos derechos fundamentales también se violentan cuando hay injerencias que tienen como objetivo amedrentar y ejercer presión, para afectar la imparcialidad e independencia de nuestras actuaciones. La única manera de ofrecer a la sociedad, jueces como agentes de paz, es garantizando la paz que merecemos y necesitamos a través del respeto a nuestras decisiones, que fortalecen la paz social y que constituyen un pilar fundamental, en un Estado de Derecho. Gracias.

MODERADOR

Muchas gracias doctora María Paulina. Ahora por favor del doctor Carlos Humberto Midence Vanegas, Magistrado de la Corte Centroamericana de Justicia. Le recuerdo, tiene diez minutos para contestar a las dos preguntas. Muchas gracias.